El tubo más largo de dos metros y medio se utiliza con mayor frecuencia como enlace para obstáculos medios-altos y altos, a los que añade fuerza, estabilidad y, sobre todo, posibilidades de entrenamiento de técnicas adicionales como el equilibrio. En las versiones inferiores, ofrece un espacio cómodo para entrenar todos los saltos, incluidos los que ocupan más espacio. También es un buen accesorio para conseguir un mayor número de saltos precisos y en el caso de su diseño alto, da la posibilidad de balancearse y saltar desde el lachei.